// 008
Solía pensar que la ambición era tener paciencia.
Pero últimamente… no estoy tan seguro.
Algo cambió. No sé si fue una conversación, un libro, un loop de ideas a las 2am.
Pero estoy entrando en una nueva etapa.
Una donde todo se siente urgente.
Y no es ansiedad.
Tal vez la única forma de describirlo es hambre.
Pero no esa hambre de “quiero tener éxito” que suena bonito en un tweet.
Hablo de una obsesión que se mete en la piel. Que me despierta antes la alarma. Que hace que cada minuto quieto se sienta como un error táctico.
Mucha gente tiene metas. Yo he decidido cambiar mis metas por un enemigo: el tiempo.
Y creo que eso lo cambia todo.
Cuando el tiempo es tu rival, tu día no empieza con un café. Empieza con una guerra contra lo que roba tu atención. Contra lo que no suma. Contra cada “sí” que debí haber dicho que no.
Me estoy volviendo implacable (es la única forma en la que lo puedo describir) 😅.
Lo noto en cosas pequeñas.
Digo “no” a cosas mucho más que antes. El otro día, borré 12 apps de mi celular sin pestañear. Silencié todos los grupos de WhatsApp y Telegram.
Pero algo en lo que tengo que trabajar y recordar todos los días es que: no quiero hacer más cosas, solo por hacerlas.
Quiero lograr más impacto en menos tiempo.
Y es más difícil.
Porque no se trata de estar más ocupado. Se trata de ser más certero. Más intencional.
Estoy afinando todo. Rutinas, procesos, proyectos.
Si no escala, se va. Si no tiene potencial de cambiar algo (en mí o en otros), cuello.
Y no sé si tú también lo estás sintiendo… pero hay algo en el aire.
Como si estuviéramos entrando en una nueva fase.
Donde el tiempo no te da segundas oportunidades. Donde la gente que gana no es la que sabe más… sino la que actúa más rápido, con más precisión, y menos drama.
Es decidir, sin pedir permiso, que tu vida no va a ser promedio.
Que no vas a esperar a tener todo listo para empezar.
Que vas a continuar, aunque duela. Aunque la voz interna diga “mejor espera.”
Estoy redefiniendo mis estándares.
Y si tú también estás en esa etapa, no estás solo/a.
Nos estamos moviendo diferente.
Con más intención. Más agresividad. Más urgencia.
Porque el tiempo… no se vence con excusas. Se vence con obsesión absoluta.

